Resumen
Descargar Un dios a mis pies de Francisco Correa Alex Gabarda era el hombre perfecto. Hermoso. Joven. Atractivo. Médico. La mejor amiga de mi hermana.
Y el hombre que salvó a mi padre.
Y que había decidido. PARA MI.
la mujer más feliz del mundo.
Hasta el día de hoy.
Al día todo se fue abajo.
Alex me dio las llaves de su coche.
Él confiaba en mí, y yo ir a él.
Y conductor borracho lo sacó de todos nosotros.
Me estrellé contra un tren.
Se tardó 12 meses en recuperarse.
Pero Alex … cayó en coma.
Han pasado 3 años …
… Ellos me llamaron. Eran para separarlo.
Me pasé toda la noche llorando.
Un despertar quiere morir.
Y entonces … ella me llamó.
Alex había despertado.
Alex era un guerrero.
Mi luchador.
expediente
Título: Un Dios a mis pies
Autor: Francisco Correa
ASIN: B07Y2D4FL4
Serie: II a partir de un dios
Editorial: Libros de Fábrica
Fecha: 8 Enero 2020
Tamaño: 0.62MB
Idiomas: Español
Literatura Infantil: Literatura
Páginas: 278
El formato de descarga: epub y pdf
Leer el primer capítulo:
Era lo más cercano a una pesadilla. Tenía las manos atadas con una cuerda,
mientras que su cuerpo estaba completamente desnudo. mantenido descubierto ni sus ojos y la boca,
mientras trataba de mover las manos y no podía hacer todo lo que podía hacer era
comenzar a llorar.
Se había despertado antes de lo esperado, por lo que era totalmente inesperado para Martin
escuchar en la sala de todos los gritos. Vivía en un apartamento, por lo que era posible que
los habitantes de la parte superior o en el piso inferior, los gritos de desesperación que la chica escuchadas
Empezó a correr.
Fue, por supuesto, fue capturado, fue secuestrado por alguien que era su mejor amigo, todo
la confianza se colocó en él, por lo que no tiene sentido en absoluto que esta
de esta manera se comportan de manera repugnante. Martin paciencia había terminado, que tenía
totalmente instaló en su interés, y Martha, todo lo que había hecho todo lo
rechazado, en lugar de hacerlo, por lo que había había sido su vida juntos en este lugar mejor amigo
humillante y devastador para Martin.
De alguna manera, ella era el peor aspecto había provocado este hilo,
que desde el principio, trató como resultado de convertirse por amor genuino.
Martin había entrado en la habitación de inmediato y trató de calmarla, ya que este batido
así que intento violento de liberarse de las cuerdas.
– ¿Estas loco? Ahora déjame ir, que ya supera los límites de la razón, Martin. –
Llamó a la chica como ella comenzó a la desesperación.
– Voy a ahogarse, Martha. No creo que le pongo a llorar de esa manera. – Ella dijo
Martin, cuando se acercó a sus derechos sobre sus soportes corporales y atar un lazo en
su boca.
En ese momento, el teléfono comienza a Martha en la distancia fue oído
en su habitación, que parecía ser una señal. Este hombre estaba totalmente perdida
salud mental, y que estaba listo para llevar a la chica a su esclava sexual.
Después de su asfixia, se apartó de ella, fue a un espejo y comenzó
deshacerse de sus ropas. Martha siempre se preguntaba cuáles serían los planes para este
Objeto que reside completamente en la oscuridad. Este fue el monstruo vive en ella
este individuo había calmado durante todo el tiempo, silenciados, pero ahora están
control completo del animal perdido y entonces éstos se puede liberar y
con su flujo de energía, sólo los resultados que se esperaba fatal.
Marta pensó que iba a morir, el hombre que ella y el final de la cata podría ser objeto de abuso,
Él termina matándolos a no declarar o incriminar. Fue difícil para ella, pero el único
O en una situación como esta ventosa licencia argumentarían que colaboraría.Cuando Martin encontró completamente desnudo frente a ella, Martha no pudo
quitarse los temblores, mirándolo al revés, y parecía que acariciado de su pene, la preparación
para penetrar en su parte superior de la misma y comenzar.
Martha se dio cuenta de que esta era la entrada al infierno, él siempre se había negado a dormir
con Martin, y aunque esto era muy interesante fue la última cosa que quería comenzar una interacción física
con el. Se parecía a un miembro de este caballero era siempre mayor, endurecido,
y se humedeció los labios con la lengua al probar con lo que vio.
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